Biografía de una Mirada - Henri Cartier-Bresson

Fino, elegante, paciente y poderoso. Es como yo describiría el trabajo de Cartier-Bresson. Es un observador nato, la fotografía se le da de una manera natural y aparenta que es fácil tomar los disparos que toma. La mirada de Cartier-Bresson me parece singular, todas sus piezas tienen una profundidad particular, un significado y una vibra única. Todas las piezas que se muestran en el documental tienen un aura onírica, por mas que algunas veces toma fotos de cosas "cotidianas" su trabajo alude a los sueños. 

Hay una parte en la que Henri dice que hay veces que la fotografía se resume en esperar, en buscar el disparo que uno ya tiene pensado. Esperar, esperar, esperar, hasta que todo se acomoda frente al ojo que es el que encuadra y la cámara hace el resto. Sin duda, Cartier-Bresson es una especie de gurú de la foto. Cada una de sus aportaciones en el documental son frases llenas de sabiduría, cualquiera de ellas son dignas de tomar nota. A lo largo de el documental, Cartier-Bresson nos da una clase. 

Es lindo como él es el que está presentando sus fotos. Sus fotos FÍSICAS. Henri Cartier-Bresson es el guionista de el documental, nos va presentando cada foto. Da uno que otro comentario acerca de lo que pasaba, como fue que él hizo el disparo, donde tomo la foto, etc... Por lo mismo el documental es muy digerible. Combinando la presentación de Bresson con las intervenciones de los demás fotógrafos hace que el documental sea agradable. 

Me quedo con un gran sabor de boca al conocer el trabajo de Henri Cartier-Bresson y conocerlo a él. Me parece genial su trabajo. Es un fotógrafo GRANDE. Hay un talento indiscutible en su trabajo. Todas sus fotos hacen que el espectador quiera comprender el mensaje y la historia que está contando el autor. Las fotos de Cartier-Bresson desatan en el público un interés que le da vida a sus fotografías. Fantástico.